Como en cualquier industria donde los presupuestos de inversión son limitados, la competencia por capital es intensa y feroz. Países de todo el mundo, y hasta estados o provincias, compiten entre sí.

En un análisis que realizamos hace unos meses, encontramos que México necesita captar el 2.4 por ciento de las inversiones globales de exploración y producción de hidrocarburos para recuperar su producción petrolera y llevarla 2.8 millones de barriles diarios.

En el ranking del Fraser Institute, México ocupa el lugar 77. Aunque puede sonar desalentador en un universo de 97 competidores, también representa una gran oportunidad para mejorar en la tabla al propiciar un ambiente más amigable para las nuevas inversiones.

Los empresarios, al contestar la encuesta, midieron a México calificando 16 categorías asociadas a la política de desarrollo del sector energético. A cada una de éstas, les asignaron frases positivas o negativas que van desde “Es un factor que incentiva la inversión” hasta “Por este factor no invertiría en este país”.

Los segmentos que recibieron la menor cantidad de comentarios negativos fueron los relacionados con regulación de áreas naturales protegidas, regulaciones ambientales, barreras al comercio y la resolución de disputas legales. Los que recibieron el mayor número de comentarios negativos y que son el área de oportunidad para mejorar, son la regulación laboral, seguridad, los procesos legales y la inconsistencia o duplicidad de medidas regulatorias.

Como se puede observar en la siguiente tabla, la mayor parte de las opiniones negativas sobre México son apenas 3 de los 16 rubros evaluados: seguridad, procesos legales y regulaciones laborales.

Resultados de las opiniones en sentido negativo sobre México