La Segunda Convención Nacional Petrolera fue una excelente oportunidad, sí, para reflexionar sobre qué elementos individuales requieren un apretón de tuercas. Pero la principal conclusión que nos llevamos es que los resultados tempranos —la evidencia— apuntan a que lo que se necesita es continuidad.
Llevamos mucho tiempo hablando de que el nuevo modelo energético mexicano dará resultados en el futuro. Y esto, aunque es cierto y representa una perspectiva responsable, le ha quitado fuerza en el imaginario colectivo a lo mucho que ya se ha logrado. La tasa de restitución de reservas y la producción petrolera aún no se han recuperado, pero ya hay otros indicadores que empiezan o a despegar o a repuntar.
Un buen ejemplo es la actividad exploratoria. A la hora de aterrizarlas en planes de exploración y planes de desarrollo, las Rondas 1.1 y 1.2, de aguas someras, se tradujeron en 13 pozos exploratorios y 430 millones de dólares para 2017 y 2018, tan sólo desde la perspectiva de exploración. Más allá de los números absolutos, implican prácticamente el 30 por ciento de los pozos exploratorios totales para 2017 y 2018. (Consulta nuestra metodología, supuestos y la discusión de nuestros resultados aquí). Son resultados tempranos que sustentan el optimismo.
En un sentido similar, Guillermo García Alcocer —quien lideró muchos de los esfuerzos por crear un mercado competitivo de exploración y producción y hoy preside a la CRE— nos explica, en la opinión que publicamos esta semana, que:
“Desde el punto de vista de la inversión en exploración y extracción de hidrocarburos, estudios de sísmica, el programa de construcción de gasoductos y proyectos de generación de energía limpia se tienen comprometidos más de 70 mil millones de dólares en inversiones adjudicadas, equivalentes a una tercera parte del Presupuesto de Egresos de la Federación del 2017.”
Sin duda es una comparación muy interesante. El artículo entero vale mucho la pena para dimensionar el tamaño de la transformación, no sólo desde la perspectiva de exploración y producción sino más allá.
Por si te lo perdiste
- Muchas buenas noticias en el marco de la Segunda Convención Nacional Petrolera. El Secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, anunció que se licitarán más áreas en las siguientes rondas petroleras. También aprovechó para confirmar el apoyo de México al acuerdo de la OPEP (que ya se concretó) para buscar sostener los precios petroleros. Por último, anunció que el 21 de junio la Agencia Internacional de la Energía definirá si acepta a México como miembro.
- En la sesión del viernes, la CNH anunció la lista de pre-calificados para la Ronda 2.1, a celebrarse el próximo 19 de junio. Son 25 licitantes, 20 individuales y 5 consorcios. Nuestra interpretación hasta el momento es que es una señal muy positiva que sea un grupo todavía más amplio y diverso que el que participó en la Ronda 1.1.
- En su sesión del lunes, la CNH aprobó que el área del bloque Nobilis-Maximino sea ampliada. Además, dio su visto bueno para usar contratos de licencia en la Ronda 2.4 El comisionado Héctor Acosta dio una explicación interesante sobre su perspectiva de contratos petroleros argumentando que se hace más eficiente administrarlos y fiscalizarlos, a la par que se evitan complejidades para la administración de la producción petrolera.
- Te recomendamos la columna de Raymundo Piñones, director ejecutivo de la AMEXHI, en El Financiero, resumiendo sus reflexiones sobre la Segunda Convención Nacional Petrolera.
- Por último, un análisis de S&P Global Platts señala que la producción de gas natural podrá caer hasta 16% más en los siguientes años, como resultado de que se están perforando menos pozos.
“Producción compartida debería ser un contrato excepcional. Debería ser la última opción para nosotros firmar un contrato con privados para estas actividades de exploración y extracción”.
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Pablo