En el manejo de su portafolio de inversiones, una empresa petrolera destina sus inversiones no sólo a producción, sino también a exploración. En este sentido, poner la meta de inversión sobre uno solo de estos indicadores genera un incentivo que puede ocasionar más problemas hacia el futuro si sólo se enfoca en la producción y no en la exploración de nuevos yacimientos.
Aunque en su anuncio López Obrador no dividió el monto que se va a invertir en producción y el que se destinará a exploración, una menor inversión en exploración tiene un impacto directo en el volumen de reservas petroleras que se contabilizan cada año y en la tasa de restitución a mediano y largo plazo. Además, estas medidas tienen un efecto retardado pues lo que no se invierta hoy en exploración, no necesariamente tendrá consecuencias mañana, pero sí en los siguientes años con incorporaciones más lentas de reservas.
Hay que recordar que en la restitución de reservas no sólo confluyen los aspectos técnicos del número de barriles encontrados, sino que además se agrega una variable económica que dimensiona el volumen de barriles que es económicamente viable extraer con un precio del petróleo promedio y costos de producción, entre otros.
Inversiones en exploración y producción de hidrocarburos por año
(millones de pesos)