Entre 2016 y 2017 Brasil pasó por un nuevo proceso de reformas para impulsar la inversión en exploración y producción de hidrocarburos. La última licitación mostró el interés de las compañías por participar en este sector reformado. Entre los principales cambios que realizó el gobierno federal de Brasil, están:
- Más libertad para Petrobras
El 5 de octubre de 2016 el congreso brasileño pasó una reforma que ataba a Petrobras, la empresa estatal, a formar parte de todos los consorcios petroleros que tuvieran como objetivo explorar y explotar el presal brasileño. Este cambio dio marcha atrás a las reformas de 2010 donde obligaba a la petrolera nacional a adquirir al menos 30 por ciento del interés en los campos de hidrocarburos en esta región petrolera.
Ahora, la empresa tendrá preferencia si en algún bloque quiere tener al menos 30 por ciento de interés en un área a licitar.
- Reducción en el contenido local mínimo
La obligatoriedad de cubrir con contenido local en las inversiones en bloques exploratorios de aguas profundas se redujo de 37 a 18 por ciento mínimo. Para los bloques en desarrollo y en producción en las mismas áreas, el contenido nacional pasó de 55 a a 25 por ciento en la construcción de pozos; 40 por ciento en las actividades submarinas; y 25 por ciento en las unidades de producción.
- Régimen fiscal con incentivos para áreas frontera
En 1999 se creó un régimen fiscal especial para la importación y exportación de bienes destinados para la exploración y producción de hidrocarburos, conocido como «Repetro», que buscaba reducir la carga impositiva en los proyectos.
Repetro expiraría en el 2019, pero el ministerio brasileño de minas y energía ha trabajado con el ministerio del tesoro para extender el esquema 20 años.
- Primer plan de licitaciones y áreas amplias
Otra modificación fue la publicación del primer plan de licitaciones para el periodo 2017-2019 que establece cuáles serán las siguientes 6 licitaciones petroleras además de las 2 que están en curso de licitación y la que se adjudicó este mes.
