Idea central: En los primeros 6 años, Hokchi y Eni podrán invertir alrededor de 867 millones de dólares anuales. Estos dos contratos, que ya tienen un plan de desarrollo aprobado por la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH), han traído actividad y una visión complementaria a la de Pemex, para desarrollar una de las áreas donde México ha sido líder mundial: aguas someras.

Análisis a detalle.. De acuerdo con el plan de exploración de Hokchi, la empresa va a invertir 2 mil 500 millones de dólares en un periodo de 23 años (2017-2040). Pero, aunque el horizonte de inversión es largo, la gran mayoría se concentra en las fases iniciales del desarrollo de infraestructura.

En el caso de Hokchi, el Sistema de Información de Hidrocarburos muestra que en los primeros 6 años (2017-2022) se invertirá el 52 por ciento de los 2 mil 500 millones. La razón es sencilla: los contratos petroleros destinan buena parte de sus recursos a las fases iniciales del contrato para la construcción de infraestructura (como arrendar barcos, plataformas de perforación construcción de las instalaciones de producción, los ductos de transporte de hidrocarburos, entre otras cosas). En las fases posteriores, la inversión es menor.

En el caso del plan de desarrollo de Eni, podemos esperar que el ritmo de las inversiones sea el mismo. Aunque el detalle de la inversión anual aún no está disponible públicamente, decidimos asumir para nuestro análisis que la curva de inversiones sería similar a la de Hokchi. Esto implicaría que en los primeros 6 años se van a invertir casi 4 mil millones de dólares o, en promedio, 650 millones de dólares anuales.

Inversiones en perspectiva. Para poner estas cifras en perspectiva, el promedio anual de 867 millones de dólares que se invertirían por Hokchi y Eni, representan el 22 por ciento de la inyección de capital que planteó Andrés Manuel López Obrador —virtual presidente electo— para Pemex en 2019. En 2018, la inversión estimada de Pemex en exploración y producción fue de casi 5 mil millones de dólares. Es decir, las inversiones de Hokchi y Eni ya son muy significativas en la perspectiva nacional.

El potencial del nuevo modelo energético mexicano para atraer inversiones queda de manifiesto si consideramos que el de Eni y Hokchi son apenas dos contratos, de un total de 105 que se han firmado hasta la fecha.

La importancia de los contratos en aguas someras

Hokchi y Eni tienen 2 de los 31 contratos que se han adjudicado en aguas someras del Golfo de México en las 3 rondas petroleras que ya han concursado. Sólo estos dos, han alcanzado un desarrollo importante en un área que ha sido emblema de México como potencia petrolera mundial. No obstante, a pesar de toda la experiencia que Pemex ha acumulado en estas áreas, en la operación de una cartera completa de proyectos de distintos tipos, la empresa puede desestimar el potencial de un bloque o retrasar su desarrollo, aunque el área sea atractiva.

La contabilización de reservas. Si vemos la trayectoria de estos campos, en 2003 Pemex descubrió algunos de los campos que se incorporaron a los bloques de Eni y Hokchi. Para 2014, las reservas eran 1P, 2P y 3P, respectivamente, eran de 84.1, 188.2 y 280.4 millones de barriles de petróleo crudo equivalente.

En 2018, estos valores se incrementaron más de 2 veces.

Reservas petroleras por área (1P, 2P y 3P) 

(millones de barriles de petróleo crudo equivalente)

En perspectiva, estos dos contratos petroleros tienen una importancia que trasciende las inversiones y las reservas por si mismas: los contratos petroleros son una fuente externa y adicional de inversión que no sustituye a la de Pemex, sino que la complementa y la crece.