Esta semana tres empresas decidieron renunciar a una parte de las áreas donde están operando.
Esta renuncia voluntaria, que en México es la tercera vez que ocurre, es una práctica común en el mundo donde los Gobiernos pueden revalorar sus áreas ─y re-concursarlas para conseguir un operador que las pueda evaluar─ dan pie a nuevas rondas de licitación que generan actividad nueva. Que un operador no encuentre potencial en un área o no le sea económicamente rentable producirla no significa que no tenga potencial, sino que con otro esquema de contratación u otras condiciones económicas sí se puede generar valor.
Además, la devolución de las áreas es un mecanismo que ayuda a generar mayor rentabilidad económica para las áreas, ya que las empresas pagan un valor económico por la ocupación superficial de las áreas. Si bien estos montos pueden ser menores cuando se genera un ingreso por la venta de los hidrocarburos, en las áreas puramente exploratorias ─que no generan ingresos todavía─ el pago de ocupación tiene un peso significativo en las finanzas de un proyecto.
Como lo explica la nota de Karol García, en El Economista, estas son las áreas que han sido devueltas parcialmente.
Fecha | Contratista | Superficie devuelta (KM2) | % del campo devuelto | Nombre del área | Ronda en la que fue adjudicado |
Septiembre – 2018 | Consorcio Petrolero 5M del Golfo | 65.4 | 38% | Benavides – Primavera | 1.3
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Julio – 2019 | Pantera Exploración | 213.2 | 48% | Área 5, Burgos | 2.2
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Julio – 2019 | Capricorn Energy – Citla Energy | 467 | 48% | GTMV 01 | 3.1 |
Julio – 2019 | Iberoamericana de Hidrocarburos | 180 | 50% | 1BG Burgos | 2.2 |