7 principios para una buena gobernanza de los reguladores

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La OCDE ha convenido que, como una mejor práctica internacional, los órganos reguladores deben seguir 7 principios para asegurar que tienen una buena gobernanza. Aquí te decimos cuáles son y en qué consisten:

 

  1. Claridad en los roles:

Para que un regulador entienda y cumpla su función de manera efectiva, es esencial que sus objetivos y funciones sean definidas claramente por la legislación.

Al regulador no deberían asignársele objetivos que sean conflictivos. o deberían otorgárseles las capacidades administrativas y mecanismos de resoluciones en caso de que se presente un conflicto. La legislación también debería proveer poderes claros y apropiados para alcanzar los objetivos establecidos. Al mismo tiempo, los reguladores deberían estar explícitamente empoderados para coordinarse y generar sinergias de cooperación con otros cuerpos relevantes de formas transparentes.

 

  1. Prevención de la influencia indebida y mantenimiento de la confianza

La independencia del gobierno y de la industria regulada puede mejorar los resultados regulatorios al permitir que el regulador tome decisiones que sean justas e imparciales. Es importante que las decisiones y funciones regulatorias se lleven a cabo con la máxima integridad para garantizar que haya confianza en el régimen regulatorio. Esto es aún más importante para garantizar el estado de derecho, fomentar la inversión y tener un entorno propicio para un crecimiento inclusivo basado en la confianza. Esto requiere un enfoque proactivo para regular que sea accesible por las entidades reguladas y, sin embargo, dentro de las prioridades estratégicas nacionales.

 

  1. La toma de decisiones y la estructura del cuerpo directivo para reguladores independientes

Los reguladores necesitan acuerdos de gobernanza que aseguren que su funcionamiento conservará su integridad regulatoria y cumpla los objetivos regulatorios de su mandato. La estructura del órgano rector del regulador (por ejemplo, un solo jefe o una junta directiva) debe estar determinada por la naturaleza de las actividades reguladas y su motivación. La membresía del cuerpo directivo también debe proteger de posibles conflictos de interés o influencia del proceso político y debe ser, en última instancia, para el interés público.

 

4.     Responsabilidad y transparencia

Las empresas y los ciudadanos esperan la entrega de resultados regulatorios del gobierno y las agencias reguladoras y el uso adecuado de la autoridad pública y los recursos para lograrlos. Los reguladores son generalmente responsables ante tres grupos de partes interesadas: i) los ministros y la legislatura; ii) entidades reguladas; iii) el público. Las expectativas para el regulador deben publicarse y los reguladores deben informar regularmente sobre el cumplimiento de sus objetivos, incluso a través de indicadores de desempeño significativos.

 

  1. Compromiso

Los buenos reguladores han establecido mecanismos para el compromiso con las partes interesadas como parte del logro de sus objetivos. El conocimiento de los sectores regulados, las empresas y los ciudadanos afectados por los esquemas regulatorios ayuda a regular de manera efectiva. Los reguladores también deben comprometerse de manera regular y deliberada con las entidades reguladas y otras partes interesadas para mejorar la confianza del público y las partes interesadas en el regulador y mejorar los resultados regulatorios.

 

  1. Financiamiento

El monto y la fuente de financiamiento para un regulador determinarán su organización y operaciones. No debe influir en las decisiones reglamentarias y el regulador debe poder ser imparcial y eficiente para lograr sus objetivos. Los niveles de financiamiento deben ser adecuados y los procesos de financiamiento deben ser transparentes, eficientes y simples.

 

  1. Evaluación del desempeño

Es importante que los reguladores estén conscientes de los impactos de sus acciones y decisiones. Esto ayuda a impulsar mejoras y mejorar los sistemas y procesos internamente. También demuestra la efectividad del regulador para aquellos a quienes rinde cuentas y ayuda a construir confianza en el sistema regulatorio. Las decisiones regulatorias, acciones e intervenciones del regulador deben ser evaluadas a través de indicadores de desempeño. Esto crea conciencia y comprensión del impacto de las propias acciones del regulador y ayuda a comunicar y demostrar a las partes interesadas el valor agregado del regulador.

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