Por: Daniel Hau

Ser un joven profesionista de una carrera relacionada con el sector energético internacional ha sido muy interesante y un gran reto que sigo tomando día a día.

La transición entre ser estudiante y joven profesionista no ha sido nada fácil, pero me ha dado muchas experiencias que, sin mi familia, mentores y mi universidad, prácticamente no podría haber alcanzado. Estos elementos son factores determinantes que, en la vida de cualquier joven, forjan la visión que adquirimos sobre la industria del petróleo y gas.

Cuando hablamos de “La Industria de Petróleo y Gas” lo más normal sería suponer que soy ingeniero. y sí, lo soy. Estudié ingeniería petrolera en el Instituto Tecnológico de Coatzacoalcos. Pero así como lo puedo decir como ingeniero, también podría expresar estas palabras si fuera economista, abogado, arquitecto… en fin. La carrera que ustedes gusten, encuentra un nicho de desarrollo aquí, en la industria energética.

Y es de esto de lo que quiero hablar hoy.

Hace casi un año escribí un primer texto que se publicó en esta misma plataforma. En ese momento, quise hablar sobre las capacidades y habilidades que debe tener cualquier aspirante a ser un ingeniero multinacional y habilidoso que igualmente pueda trabajar en Asia que en África; en tierra o en mar. Esas habilidades a las que me refería (hablar inglés, aprovechar a nuestros mentores, buscar nuevas oportunidades, salir de la escuela para trabajar en la industria) son tan vigentes hoy como hace un año y. De hecho, tan vigentes son que tanto a mi como a muchos de mis compañeros que las aplican, nos ha permitido adquirir buena experiencia al trabajar para empresas en Beijing y Hong Kong, ir a Dubai y a Rusia a dar conferencias sobre lo que se hace en México. Al igual que lo dije en el texto de hace un año, lo refrendo hoy: las capacidades que mostremos hoy serán la llave hacia un futuro más próspero.

Hoy quisiera complementar el tema que abordé esa vez desde una arista que sólo la experiencia de los últimos meses hizo darme cuenta de una carencia importante en la industria energética: profesionales multidisciplinarios y que provengan de otras carreras que no sólo sean ingeniería.

En este nuevo modelo energético que se está aplicando en México hay espacio para que estudiantes de todas las carreras puedan aplicar sus conocimientos. De hecho, la industria necesita de sus conocimientos para continuar creciendo.

Para ilustrar esta necesidad les voy a poner un ejemplo en una situación común en la industria: la perforación de un pozo. Los ingenieros, geólogos, matemáticos, químicos, etc, se juntan para determinar cuál es la mejor forma de perforarlo sin generar un daño ambiental o industrial y aprovechando al máximo el volumen total de los hidrocarburos. Pero pronto se encuentran con dudas: ¿la comunidad aledaña los va a dejar trabajar? ¿Pueden estos mismos ingenieros que van a perforar, hacer la contabilidad de todo el proyecto? ¿Están preparados para difundir la operación de la industria a quienes no conocen nada de ella? Si se ven involucrados en un accidente ¿están preparados para autodefenderse legalmente? Posiblemente puedan hacerlo de forma emergente, pero su preparación nunca estuvo enfocada en hacerse cargo de estos efectos multilaterales. Es ahí donde el sector energético pierde su carácter monotemático y pasa a ser, en realidad, multidisciplinario.

No sólo necesitamos ingenieros que sepan aplicar el arte del pensamiento y dirigir los conocimientos hacia la invención de nuevas tecnologías y creación de procedimientos efectivos, sino también abogados que apliquen y sofistiquen la aplicación de las leyes en el país tanto en tribunales como en las mismas comunidades en las que trabajamos. Necesitamos de los economistas que conozcan los balances de la industria y repartan sus beneficios; necesitamos comunicólogos preparados para explicar cómo opera la industria a quienes no la conocen pero son afectados por ella. Necesitamos sociólogos que midan el impacto del sector sobre la población; lingüistas que rompan las barreras del idioma… en fin.

La intención de este texto no es hacer una lista de todas las vacantes laborales que hay en la industria, sino hacer un llamado a todos los estudiantes de distintas carreras a que se interesen un poco en el sector. Aquí hay un nicho de oportunidad de desarrollo que necesita de visiones frescas y originales. Hay mucho por hacer.

Y para los que ya están en la industria, refrendo lo que dije hace un año: sigan enfocándose en su capacitación constante, en la identificación de áreas de oportunidad, el planteamiento de soluciones y au ejecución. Estos son los puntos clave para el éxito en esta y muchas industrias. Utilizar nuestro tiempo para adquirir habilidades y conocimientos nuevos es una de las llaves que nos abrirán las puertas al desarrollo porque tendremos un valor agregado y estaremos listos para cuando un proyecto o empresa requiera profesionistas preparados.

Gracias al equipo de Pulso Energético por darme la oportunidad de publicar mi punto de vista por segunda vez. Es importante que las voces de estudiantes y jóvenes profesionistas sean escuchadas.

Daniel Hau

Egresado de la carrera de ingeniería petrolera del Instituto Tecnológico de Coatzacoalcos.