En diciembre publicamos nuestro último número basado en el plan de crecimiento de la producción petrolera a corto plazo. Como dijimos, en el próximo año, la producción petrolera crecerá por la terminación y reparación de pozos. Esta estrategia puede ser efectiva en el corto plazo. Pero, de acuerdo con los mismos datos, su efecto se diluye rápidamente.

Como lo reflejan las gráficas de Pemex, a partir del 2020 los nuevos descubrimientos serán el peso que incline la balanza hacia una mayor producción.

Estimación de la producción 2019-2024

(Miles de barriles diarios)

Fuente: Pemex

Buena parte de esta nueva exploración implicará encontrar nuevos yacimientos donde se considera la presencia de recursos prospectivos y delimitar los campos donde ya se conoce que hay reservas petroleras (2P y 3P) importantes. La mayor parte de las reservas 2P y 3P se encuentran en yacimientos de aguas someras y terrestres mientras que los recursos prospectivos están en áreas de aguas profundas y bloques de shale.

¿Dónde va a explorar la nueva administración?

Con esta urgencia por detonar una actividad acelerada de exploración, la estrategia de la nueva administración será un punto de discusión y análisis constante.

Como explicó la nueva administración en la presentación del Plan Nacional para la Producción de Hidrocarburos, la estrategia exploratoria tendrá 2 momentos clave que tendrán como eje prioritario, buscar nuevos recursos en aguas someras y campos terrestres tanto en el norte como en el sur del país.

En los dos primeros años de la administración, estos nuevos proyectos exploratorios podrán crecer de 1,120 a 1,436 millones de barriles de petróleo crudo equivalente entre 2018 y 2020. A partir de ese año, el efecto incremental se estabilizará para contabilizar 1,300 millones de barriles cada año. Cualquier incremento tendrá que venir de otras áreas que no han sido contempladas en este plan acelerado y que, en la presentación, están identificadas como “Nuevas Áreas”.

Incorporación de reservas 3P 2019-2024

(Millones de barriles de petróleo crudo equivalente)

Fuente: Pemex.

¿Cuánto va a invertirse en exploración?

Descubrir estos nuevos yacimientos implica incrementar las inversiones en exploración. La nueva administración planea invertir en 2019, poco más de 38 mil millones de pesos en estas actividades para 2019 (44 por ciento más que el año pasado). Este volumen de recursos regresa las inversiones en exploración a los niveles promedio que tenía antes de la caída en los precios de los hidrocarburos (aunque en dólares —moneda en la que se cotizan la mayor parte de los servicios petroleros— el efecto es menor por el tipo de cambio) y cuando Pemex tenía altas tasas de restitución de reservas.

A pesar del incremento en las inversiones, hay que tomar en cuenta que, aún cuando la restitución de reservas fue alta, el volumen de nuevos barriles encontrados no consiguió revertir la declinación en la producción. Además, es necesario considerar los tiempos que le han tomado a Pemex pasar de un descubrimiento al desarrollo de un yacimiento. Como lo hemos reportado anteriormente, en los casos más acelerados, Pemex ha podido llegar a producir en un periodo de entre 3 y 4 años, mientras que hay otros en los cuales ha tardado más de una década. Es decir, los supuestos son ambiciosos.